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Cuadro de mando para una Pyme beneficios y cómo Crearlo

by Jurofe
Cuadro de mando para una Pyme

Cuadro de mando para una Pyme beneficios y cómo Crearlo. El cuadro de mando para una pyme es una herramienta de control de gestión que puede ayudar a la empresa a mantener una perspectiva clara y global, aunque a la vez detallada del estado de la misma. Para poder hacer una descripción de lo que es un cuadro de mando integral, debemos imaginar que se trata de una fotografía de las áreas claves de la pyme, es decir, una foto del momento actual y que nos hace pensar en cómo podemos avanzar de cara al futuro y hacia dónde. El cuadro de mando es una herramienta que permite, por tanto, tomar decisiones, porque nos da toda la información de un solo vistazo y porque está siempre al alcance de la mano, sin importar el tamaño de la empresa o la cantidad de variables que intervengan en el desarrollo de esta. Es una forma de saber cuál es el estado real de los parámetros más importantes del negocio y por ello, es una gran ayuda que puedes empezar a poner en marcha para tu pyme. A continuación, profundizaremos en las claves de un buen cuadro de mando y cómo crearlo de forma sencilla.

Cuadro de mando para una Pyme: Claves de un buen CMI

Existen muchísimos métodos para crear un cuadro de mando integral para una pyme, tantos como formatos, modelos y tipos de CMI pero en todos se ofrece siempre lo mismo: la información más relevante de la compañía de forma contextualizada. Insistimos: contextualizada. No se trata, por tanto, de dar datos fríos sino de ofrecer la información que permita dar una interpretación a cada información.
Lo que convierte un cuadro de mando integral en un buen cuadro de mando integral es la elección de la información que este va a ofrecer, porque, claro está no es que cada mes se deben cambiar los indicadores. Lo ideal es entender que no sirve cualquier tipo de información.

Lo que convierte un cuadro de mando integral en un buen cuadro de mando integral es la elección de la información que este va a ofrecer

Otra cosa que también es clave es que los datos sean lo más específicos posible y que a su vez, permitan saber con solo una mirada rápida qué está pasando en la empresa, es decir, que permita sacar una conclusión rápida, gracias a la información que se categoriza desde lo concreto, hasta lo general.
Llegados a este punto, podrás intuir que para poder crear un cuadro de mando integral de una pyme será absolutamente necesario tener claros los KPIs de la empresa. Los key performance indicators o indicadores claves de la empresa pueden ser muchos, pero lo importante es que estos se relacionen a los objetivos de la compañía. Si, por ejemplo, el objetivo principal de la pyme es aumentar las ventas, un indicador claro que deberá estar en el cuadro de mando será el volumen de ventas respecto al periodo anterior. En pocas palabras, los KPI son los que nos dicen con claridad si es que hemos alcanzado nuestro objetivo o no. Pero para contextualizar, siguiendo con el ejemplo del volumen de ventas, deberemos por ejemplo, incluir algunos datos adicionales como el número de productos vendidos, la cantidad de clientes potenciales, los clientes potenciales que ya han sido contactados, etc. Esto nos ayudará a saber si, cuando se reduce el volumen de ventas, se trata de un problema comercial de falta de fuerza comercial o si debemos salir a buscar nuevos segmentos de mercado porque el actual ya ha llegado a su punto de culminación. Esto es solo un ejemplo, pero seguramente tú, que conoces el funcionamiento de tu negocio, podrás saber bien qué KPIs debes incluir en el cuadro.
El cuadro de mando debe ser un espacio reducido, un slide simple que entre por los ojos, que sea atractivo (que integre colores, espacios, tamaños de letras, que muestre una clara jerarquía, etc.) Por ello, te recomendamos que, una vez tengas los KPIs elegidos, trabajes con un experto en diseño para tener la visión definitiva del mismo. Luego, esto no quiere decir que se trata de un documento estático; para nada, debe ser muy flexible y adaptarse a las necesidades de la empresa. Puedes hacerlo más operativo, más a nivel estratégico o con un toque directivo destinado a la toma de decisiones en el corto y mediano plazo.
Cada cuadro de mando es único, pero puedes inspirarte mirando otros de empresas que sirven de benchmarking.

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